Prince: talento, excentricidad y controversia

El músico nacido en Minnesota murió este 21 de abril tras una severa crisis respiratoria

Nacido en Minnesota, Prince deja al mundo del entretenimiento un legado musical que incluye ser considerado el creador del "Sonido Minneapolis", luego de que el jueves falleció en su estado natal tras sufrir una severa crisis respiratoria.

Prince Rogers Nelson, que el 7 de junio cumpliría 58 años, es un ícono de la música de la década de 1980, cuando saltó a la fama con una imagen sensual que deslumbró y un sonido mezcla del rock, el soul, el funk y el new wave estadounidense.

Entre 1993 y 2000, tras una fama a prueba de todo, optó por una extraña decisión que lo llevó a cambiar de nombre y utilizar otro impronunciable, que generó ser mencionado siempre como "El artista antes conocido como Prince". En el 2000, cuando finalizó su contrato con la Warner Bros. volvió a usar el nombre de Prince.

Aunque no fue el primero de sus álbumes, ya que antes estuvieron "Dirty Mind" y "The Time", fue "Purple Rain" el trabajo que lo catapultaría a la cima en 1984 y que originó la filmación de una película titulada igual.

De hecho, el icónico "Purple Rain" ganó el Oscar a la mejor banda sonora para el propio Prince, quien también obtuvo un premio Grammy por ese álbum, que incluyó canciones como "When Doves Cry" y "Let's Go Crazy", que le confirieron el estatus de superestrella mundial.

Tan solo en Estados Unidos, Prince vendió cerca de 39.5 millones de álbumes y unos 100 millones en todo el mundo.

Excéntrico tanto en su imagen como en su vida, Prince admitía influencias musicales de grandes como Jimi Hendrix, The Jackson 5, Sly & the Family Stone, Curtis Mayfield, Parliament/Funkadelic, Stevie Wonder, Joni Mitchell, Duke Ellington, Miles Davis, Carlos Santana, James Brown, The Beatles, Queen y Led Zeppelin.

Su infancia estuvo llena de música, dado que su padre era jazzista y le heredó un piano tras divorciarse de la madre del futuro cantante, que aprendió a tocar ese instrumento de oído.

Años después tocaba diversos instrumentos y, cuando cumplió 13 recibió como regaló una guitarra eléctrica.

Amante de los cócteles musicales más variopintos, se convirtió en la gran esperanza de la música negra tras su disco Prince (1979), en el que se incluía "I Wanna Be Your Lover", primer tema que llegó a la lista de éxitos; el clásico "I Feel For You", que en 1984 consagró a Chaka Khan, y "Bambi", la historia de un ligue femenino con tendencias lésbicas.

En 1987 dio a conocer lo que hasta hoy es considerada su obra maestra "Sign 'O' the Times".

Al principio de su carrera comenzó a tocar con la banda The Revolution, pero desde principios de los 90 toca con New Power Generation. La mayor parte de sus grabaciones las realiza en sus estudios Paisley Park.

Su excentricidad y misterio androgino, aunados a su talento, lo convirtieron en una especie de playboy y, aunque era sumamente discreto, se le conocieron romances con Susanna Hoffs (de The Bangles), Madonna, las actrices Kim Basinger, Sherilyn Fenn, Troy Beyer y Tara Leigh Patrick (a quien más tarde llamó Carmen Electra) y Sheena Easton, entre otras.

Los últimos años de 1990 y el inicio del siglo XXI vieron a Prince sortear una serie de batallas legales con empresas discográficas, además de sufrir la muerte de su hijo, Boy Gregory, procreado con su exesposa Mayte García, lo que lo sumió en una profunda depresión que generó versiones de que en algún momento intentó suicidarse.

En 2004, la industria musical empieza a hacerle justicia al talento de Prince y lo lleva al Hall de la Fama del Rock and Roll en Estados Unidos y en Reino Unido, además de que fue considerado el artista mejor pagado del año.

Prince realizó en esa época la octava gira más vista de la historia, con cerca de un millón y medio de espectadores en los 90 conciertos que ofreció por Estados Unidos. Además, ganó premios y un Globo de Oro por la canción "The Song Of The Heart" para la película Happy Feet.

En 2007, fue elegido como el artista principal para actual en el medio tiempo del Super Bowl 41, lo que coincide con la salida al mercado de su último álbum "Planet Earth".

Pero pese al éxito, el estado emocional de Prince no era el mejor y cerró la primera década del 2000 inmerso en una batalla con sus seguidores, a quienes prohibió usar imágenes suyas en internet porque lo consideraba una violación a sus derechos legales.

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