En las comunidades Guarico y Los Naranjos, en Vega Baja, los residentes ya están acostumbrados a ver caimanes.
Residentes de estos sectores alegan que han informado a las autoridades sobre la constante presencia de estos reptiles, pero hasta el momento, alegan que no han tomado acción para controlar la población.
“El pasto se ve acostado y es porque ahí mismo el caimán se sale a coger sol”, expresó un residente de Los Naranjos, identificado como Carlos Olivo.
El alcalde, Marcos Cruz, indicó que llevó el reclamo a la Procuradora del Ciudadano para citar a todas las agencias pertinentes. “De no tener los resultados esperados finalmente tendremos que acudir a los tribunales”, anticipó.
Algunos se quejan del posible peligro que representan, además de que se comen otros animales y arruinan la pesca. Sin embargo, otros le sacan provecho a la proliferación de los caimanes, ya sea disecándolos para venderlos y hasta consumiendo su carne.
Este martes, Telenoticias habló con una residente de Guarico que al momento de la visita, preparaba empanadillas de carne de caimán.
Aunque en Puerto Rico puede resultar extraño, en otros países, como Brasil y Australia, es bastante común. Aseguran que su sabor está entre el del pescado y el pollo y que es una carne limpia, libre de grasas.
