Protestan en el Capitolio contra el Proyecto 938

Se manifiestan contra la medida que impactaría a los empleados de corporaciones públicas.

Empleados unionados de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA) y de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) protestan este jueves frente al Capitolio contra el Proyecto de la Cámara 938, con el que se pretende reducir una serie de beneficios marginales de los empleados de corporaciones públicas. 

Además, a eso de las 10am, un grupo de camioneros bloqueó los carriles del expreso Kennedy en dirección a San Juan, para luego unirse a la manifestación en el Capitolio. En la tarde ya el tránsito había sido reabierto.

Los sindicatos pautaron la manifestación para las 8am, pero ya a las 7:30 había personas en el lugar. 

En la tarde ocurrió un incidente en el que el representante Rivera Guerra agredió a un manifestante que impedía su entrada al Capitolio, dándole un codazo. 

Su agresión provocó una trifulca en el que el representante también resultó herido. La Policía intervino y escoltó al legislador del lugar. 

El Consejo Estatal de la Unión de Trabajadores de la Industria Eléctrica y Riego (UTIER), sindicato que representa a los empleados de la AEE, decretó un paro en contra del Proyecto de la Cámara 938, informó Ángel Figueroa Jaramillo, presidente.

"El paro se decreta a raíz del momento en que vivimos, ante la discusión del Proyecto de la Cámara 938 que intenta llevarnos a las peores condiciones laborables jamás imaginables. Con nuestras acciones queremos manifestar nuestro repudio a ese proyecto, al gobierno y a la Junta de Control Fiscal y dejarles saber que ya basta de poner en último lugar a quienes tenemos el país funcionado”, indicó el presidente de la UTIER en declaraciones escritas.

Líderes del Partido Nuevo Progresista pretendían aprobar la medida ayer, miércoles, pero no habían logrado el apoyo de la mayoría. 

Hoy se espera que la medida baje a votación y sea aprobada, para pasar entonces al Senado. 

El Proyecto 938 impactaría a los empleados de las corporaciones públicas, igualando los beneficios marginales de estos al resto de los empleados públicos. Como resultado, cambiaría la cantidad de días que acumulan por enfermedad, vacaciones, maternidad, paternidad lactancia. En total, solo tendrían 11 licencias, como ser jurado, testigo, donación de sangre, entre otros.

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