Suspenden a agentes por no intervenir tras brutal ataque

NUEVA YORK — Dos agentes de la Policía de Nueva York (NYPD), fueron suspendidos por supuestamente no tomar una acción apropiada, en el salvaje ataque con un hacha que dejó a una joven boricua muerta y a otra mujer luchando por su vida, según le contaron fuentes de la ley familiarizadas con el caso a nuestra cadena hermana NBC 4 New York. 

Las fuentes dijeron que los paramédicos que atendieron a Angela Valle, que aún se encuentra en coma, les contaron a los dos oficiales que ella reveló que su amiga probablemente estaba muerta y que su hija de 4 años se encontraba dentro del apartamento.

Los paramédicos también les dijeron a los agentes que ella rogaba que buscaran a su bebé.

De acuerdo con las mismas fuentes, los oficiales se negaron a participar indicando que eso estaba fuera de su jurisdicción en el momento del sangriento hecho. Las identidades de los dos policías no fueron reveladas.

La víctima, Angela Valle, sigue luchando por su vida en un hospital del área.

Ellos aparentemente lo reportaron como un “asalto del pasado” con un posible cuchillo, pero no mencionaron a la niña, el hacha o la posible joven muerta en la vivienda, según las fuentes.

Cuando un supervisor de policía llegó al lugar, los mimos agentes no compartieron la información que los paramédicos les habían contado, añadieron las fuentes.

Por casi una hora, los oficiales permanecieron en la entrada del edificio mientras que Savannah Rivera, de 20 años, se encontraba casi decapitada y en un charco de sangre dentro del apartamento, explicaron las fuentes a NBC 4 New York.

El NYPD confirmó las suspensiones de los oficiales en una declaración el lunes, diciendo: "La Unidad de Investigaciones de Brooklyn North ha revisado la respuesta y las acciones de dos oficiales del precinto 83 durante este incidente, y ambos están en proceso de ser suspendidos por no haber tomado una acción apropiada."

Una persona de interés está bajo custodia y está siendo interrogada.

La Policía de Nueva York respondió a una llamada de emergencia al 911 el sábado a la 1:30 a.m.  Al llegar, encontraron el cadáver de una mujer hispana, identificada como Savannah Rivera, de 20 años, casi decapitada y con severos cortes en los dedos. 

Las autoridades luego hallaron a una pequeña de 4 años dentro de un dormitorio del apartamento ubicado en el 811 en la Avenida Flushing. La niña estaba ilesa pero fue trasladada al hospital Woodhull para ser evaluada.  

Se conoce que otra mujer, identificada como Angela Valle, logró escapar del lugar, pero llegó al hospital Elmhurst con graves heridas y se encuentra en estado crítico.

Según la uniformada, el padre de la pequeña y exnovio de Valle, llegó al apartamento para discutir con ella.

Lewis fue condenado el martes a cadena perpetua sin posibilidad de optar a libertad condicional.

Rivera intentó defender a su amiga pero el sospechoso presuntamente la atacó salvajemente con un hacha, informó la policía.

“Yo quisiera que lo mataran”, expresó la abuela de Rivera, al pensar en el terror y el dolor que sufrió su nieta antes de morir.

El presunto atacante luego corrió detrás de su exnovia pero esta logró escapar. Un conductor Uber la encontró inconsciente en la calle y alertó a la policía.

La policía presuntamente recuperó un hacha de la sala de compactación del edificio y se cree que el sospechoso pudo haber tirado el arma por el conducto de basura.

El Departamento de Policía de Nueva York anunció el arresto de Jerry Brown, de 34 años, y residente de Brooklyn, el domingo temprano. Brown enfrenta un cargo de intento de asesinato en relación con otra mujer que también se encontraba en el apartamento y fue hospitalizada en estado crítico.

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