SAN JUAN, Puerto Rico (CyberNews) - La Congregación Mita la emprendió ayer contra Samuel Beníquez y alegaron que éste intentó extorsionar a Teófilo Vargas Sein, máximo líder de los mitas, para que le pagara una suma millonaria de dinero a cambio de terminar con la demanda de paternidad que enfrentan.
“Hoy vivimos una situación similar, y quienes nos atacan utilizan ciertos medios de comunicación en lugar de someterse al rigor de los procedimientos judiciales. Aunque frente a los medios estas personas disfrazan sus ataques de intereses altruistas, lo cierto es que obedecen a intereses monetarios en contra de los bienes de nuestra Iglesia. Basta examinar la ‘carta y convenio de finiquito’ que de parte del demandante le fue entregado a nuestro Líder Espiritual, Aarón, proponiendo la terminación del pleito a cambio de un pago de ‘diez millones de dólares americanos’”, expresó la Congregación Mita en declaraciones enviadas a la prensa.
“En el ánimo de evitar el engaño continuo a que son sometidos los medios de comunicación, que a su vez informan al público, hoy divulgamos este intento de extorsión que refleja los reales motivos de Samuel Beníquez, el cual fue rechazado de plano por carta del licenciado Harry Anduze con fecha 25 de mayo de 2012”, agrega la comunicación de la Congregación.
Vargas Sein, conocido como “Aarón”, tendrá que someterse a una prueba de paternidad por ADN para determinar si es el padre biológico de Samuel Beníquez, quien lo demandó en el 2004.
Beníquez demandó a Vargas Sein por concepto de Nulidad de Procedimiento de Adopción, Fraude al Tribunal, Vicio del Consentimiento y Declaración de Filiación. En el 2012, el Tribunal Supremo ordenó la prueba de paternidad y es justamente para cumplir con este mandato que la juez superior Arlene Selles Guerrini fijó la fecha del el 11 de marzo a las 8:00 de la mañana. Beníquez deberá sufragar los costos de la misma.
Además indicaron que como establece el licenciado Anduze en su misiva, ese hecho constituye “un claro chantaje” y establece de forma inequívoca que Beníquez y Antonia Beníquez, tienen como “único propósito el lucro económico”.
“De conformidad con nuestras creencias y principios, continuamos orando por los demandantes para que los envuelva la paz y el amor y conozcan la felicidad del Espíritu Santo de Dios”, señalaron.
