El alcalde de Ponce, Luis M. Irizarry Pabón, urgió al secretario interino del Departamento de Educación, Eliezer Ramos Parés, a retrasar dos meses el inicio de clases en los planteles escolares del país, ante el alza de casos de COVID-19 en la Isla.
Irizarry Pabón, quien también es médico internista, entiende que los menores de 12 años que no pueden recibir la vacuna “se exponen a un ambiente inseguro y representa un gran riesgo para la salud y la vida”.
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“Desde que se intentó reanudar las clases presenciales el semestre pasado comenzaron a surgir con más frecuencia los casos pediátricos. Incluso, hubo menores con ventiladores. Hoy (ayer) hay 436 casos nuevos, 39 de éstos pediátricos. Incluso, 25 directores de hospitales han hecho un llamado a retomar el toque de queda en un intento por controlar la situación. La cantidad de víctimas del Covid-19 ya casi ronda el número de pérdidas después del huracán María. Esto es una emergencia que debemos atender seriamente como país”, propuso el galeno.
Dijo que variantes altamente contagiosas como la Delta, han elevado los casos pediátricos, por lo que entiende es un riegos enviar a los niños “a un ambiente escolar donde interactuarán con otros niños y adultos ajenos a su círculo familiar”.
“Es poner en riesgo su salud y su vida”, sostuvo Irizarry Pabón.
