El gobernador Pedro Pierluisi, informó el jueves que asignó cerca de 900 mil dólares al Instituto de Cultura Puertorriqueña (ICP) para de esta forma fortalecer los Programas de Arqueología y Etnohistoria al igual que el de Patrimonio Histórico Edificado.
“Los fondos asignados provienen de la reserva de la primera fase del Programa de Rescate Cultural creado por el Gobierno con los fondos de la Ley del Plan de Rescate Americano (ARPA, por sus siglas en inglés) y permitirán que el ICP pueda reclutar arqueólogos, conservacionistas y personal de apoyo adicional por los próximos tres años. Además, con esta asignación buscamos que el Instituto pueda contar con procesos ágiles, certeros y transparentes para la presentación, tramitación y evaluación de los permisos bajo su jurisdicción. Esto será de beneficio tanto a los proyectos gubernamentales de reconstrucción de Puerto Rico, como en proyectos privados que deben ser evaluados por el ICP por virtud de ley y reglamento”, detalló Pierluisi en comunicación escrita.
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Explicó que ambos programas tienen un importante rol en la implementación de la Ley 161-2009, según enmendada, conocida como la Ley para la Reforma del Proceso de Permisos de Puerto Rico. Sin embargo, debido a los recortes presupuestarios impuestos por la Junta de Control Fiscal (JCF), el ICP se ha visto imposibilitado de reclutar personal adicional para laborar en estos programas.
Por su parte, el director ejecutivo del ICP, Carlos Ruiz Cortés, indicó que estos fondos “respaldan la misión del ICP para la conservación patrimonial, añadiendo nuevo personal transitorio a través de nuestros programas de Arqueología y Etnohistoria y del Patrimonio Histórico Edificado. De este modo, podremos contar con nuevos arqueólogos, arquitectos y oficiales de permisos para la supervisión y evaluación de proyectos en zonas históricas y sitios arqueológicos. Añadiendo mayor agilidad en los procesos de endosos en permisos de construcción entre otras."
El Programa de Arqueología y Etnohistoria ofrece orientación a la ciudadanía sobre la importancia del patrimonio arqueológico, dando asesoría o consultas a proponentes de proyectos de construcción que quieran conocer con antelación las posibilidades arqueológicas que pueda tener el área que interesan desarrollar.
Mientras, el Programa de Patrimonio Histórico Edificado, identifica, protege, conserva y regula los sitios y zonas históricas que representan o reflejan la historia social, económica, cultural, política o arquitectónica de Puerto Rico, para el desarrollo cultural, económico y del turismo, el disfrute y el bienestar general de la comunidad para la investigación y educación.
Además, asegura que los usos del terreno propicien la conservación del contexto histórico-cultural. De igual forma, orienta, asesora y educa sobre la importancia del patrimonio histórico edificado y la restauración de edificaciones de valor histórico, los gobiernos, a estudiantes y al público en general.
En agosto del año pasado, el gobernador anunció la distribución de $50 millones de fondos ARPA para apoyar la liquidez financiera de instituciones culturales y fomentar la economía naranja.
