El director ejecutivo de la Autoridad de los Puertos, Joel Pizá, dijo este miércoles que la salida del crucero Mardi Gras, de Carnival Cruise Line, del Puerto de San Juan, no se debe a la reciente formalización de una alianza público-privada.
"En esencia, la razón expresada por Carnival es una de índole financiera, relacionada al costo de combustible, y otras que le han estado explicando a sus accionistas, clientes y proveedores", sostuvo Pizá en declaraciones escritas.
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Según indicó, dos días antes de la Convención Anual de la Florida-Caribbean Cruise Association (CCA), la alta gerencia de Carnival anunció al gobierno que, a partir de enero del 2023, harían ciertos cambios en las operaciones del Mardi Gras. Con el propósito expreso de ahorrar combustible y preservar sus márgenes de ganancia, explicaron que los cambios consisten en retirar la parada del Mardi Gras en el Puerto de San Juan, cuya parada típicamente forma parte de un itinerario de siete días, en sustitución por itinerarios más cortos, de tres o cuatro días, en destinos privados cercanos a los puertos base en la Florida.
"Hemos tenido conversaciones posteriores con Carnival y esperamos que su situación económica mejore y que su modelo de negocios pueda sostener más viajes con itinerarios más largos y mayores paradas en Puerto Rico", manifestó el funcionario.
El director de puertos aseguró que, a pesar de las reducciones operacionales anunciadas por Carnival, otras líneas han aumentado su presencia en el Puerto de San Juan.
"Muestra de lo anterior son los doce cruceros que han escogido a Puerto Rico como su homeport para la temporada invernal 2022-23. Asimismo, en el 2023 el Puerto de San Juan se engalanará como la casa del Brilliant Lady y el Viva, los barcos más nuevos de las líneas Virgin Voyages y Norwegian Cruise Line, respectivamente. Además, estamos trabajamos activamente con una de las principales líneas de crucero para traer un homeport en el verano de 2024. El panorama continúa siendo uno alentador para la economía de Puerto Rico”, concluyó.
