Un operativo encubierto de la Policía de Puerto Rico, denominado “Alto Calibre”, culminó esta madrugada con el arresto de 13 adultos y un menor de edad, todos vinculados con la venta ilegal de armas de fuego y drogas en múltiples municipios de la isla.
La operación también reveló una conexión con el asesinato del sargento Eliezer Ramos Vélez. El comisionado de la Policía, Joseph González, destacó que una de las armas confiscadas fue utilizada en el asesinato de Ramos Vélez, ocurrido en marzo del 2024 en el residencial Sabana Bajo en Carolina.
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SUSCRÍBETE González informó, además, que el operativo tomó ocho meses de trabajo estratégico y se realizó con la colaboración de agentes encubiertos e inteligencia policial. Los arrestos se llevaron a cabo en los municipios de Loíza, Bayamón, San Juan, Carolina, Aibonito, Caguas, Corozal, Vega Baja, Vega Alta, Cataño y Cayey.
Entre los arrestados figuran:
- Anaudi Joel Reyes Centeno, alias “Pito”, de 38 años
- Jean Carlos Pedraza García, de 23 años
- Jonathan Omar de Jesús, alias “Jesús" o "Bam Bam”, de 30 años
- Brian Rivera Rivera, alias “JJ”, de 23 años
- Jeffrey Keniel Robles Hernández, de 23 años
- Nelson Nieves Arce, de 38 años
- Ezequiel Cepeda de la Cruz, alias “Domi”, de 27 años
- Alexander Inoa Martínez, alias “Sandy”, de 33 años
- Arnold Anthony Enríquez Robles, de 30 años
- Edwin Joel Cotto González, de 24 años
- Javiel González Rivera, de 20 años
- Kevin Jomar Matos Matos, de 19 años
- Brian Alexander García Soto, alias “Brother”, de 28 años
- Un menor de 17 años, identificado con las siglas JJOC
Además, se identificó a Jeremy Maldonado Pérez de 25 años como parte del grupo, pero este no fue arrestado, ya que fue asesinado el pasado viernes en Dorado. Su cuerpo fue hallado en la carretera PR-165.
"Estos individuos operaban de forma independiente, sin lealtad a una organización específica, pero con acceso directo a almas de alto poder. Entre ellos, hay personas bajo probatoria federal, con grilletes electrónicos y con historial criminal. Son personas que representaban un riesgo real para las comunidades", indicó González.
Durante la intervención, las autoridades confiscaron más de 30 armas de fuego, incluyendo 19 rifles y 14 pistolas, junto a 42 cargadores, 882 municiones y 2.5 kilos de cocaína. También se ocuparon 14 vehículos utilizados en las transacciones ilegales.
