El exjefe de la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés), Pedro Janer, asegura que la violencia desplegada en la pasada balacera que dejó seis muertos en el Residencial Ernesto Ramos Antonini, acerca a Puerto Rico a un narcoestado.
Por esta razón, entiende que el gobierno debe enviar un mensaje contundente que contrarreste la impunidad con la que actúan los delincuentes, cada vez con más frecuencia.
“A plena luz del día, sin cubrirse las caras, sin importar quién estuviera en los alrededores, eso lo que significa es que no hay respeto por la autoridad”, expresó.
Y es que la cantidad de casquillos hallados en la escena le sorprenden, aun cuando tiene más de 20 años de experiencia.
“Los capos, ellos controlaban la política, la economía”, mencionó al indicar que es solo ese control el que hace falta que los narcotraficantes alcancen para llegar al nivel de los grandes carteles de México y Colombia.
