“El diablo se le metió por dentro”

Con una fianza de dos millones de dólares, David Hernández Urbina, durmió en prisión por el asesinato de la jove Jaimy LIz en su artamento en Carolina. El joven de 21 años admitió que en algún momento utilizó sustancias controladas, por lo que "se le metió el diablo por dentro" y la mató con un cuchillo. Contra él, se radicaron cargos por asesinato, violación a la Ley de Armas, destrucción de evidencia y sustancias controladas. Hernández supuestamente confesó el asesinato de la mujer madre de tres niños, con quien alegó compartió íntimamente el viernes y sábado. Los niños no estaban en el apartmento al momento de los hechos ocurridos en el condominio Monserrate Towers de Carolina.

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