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El Tribunal de Caguas desestimó este miércoles el caso de violencia doméstica contra el exboxeador Juan Manuel “Juanma” López Rivera.
La juez ordenó que se le retire el grillete electrónico a López, a la vez que advirtió que la orden de protección y todas sus disposiciones están vigentes hasta el 29 de octubre.
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El Departamento de Justicia anunció que no están preparados para procesar al exboxeador ante la incomparecencia de la presunta víctima en el caso, Andrea "La Peki" Ojeda Cruz, por lo que se desestiman los cargos de violencia doméstica.
A su salida de la sala del tribunal, el expúgil pidió disculpas a su expareja.
"Quiero aprovechar el momento para pedir una disculpa, un perdón, a la familia de Andrea. A su papá, su mamá, sobre todo a Andrea por todo este proceso difícil que ha pasado. Andrea es una gran mujer. Yo quiero pedirle al público en general -sobre todo a mis fanáticos- que le den su espacio", expresó López.
“Dios me puso gente buena a mi alrededor que puede descubrir algunos problemas personales, con los cuales trabajé y seguimos trabajando gracias a unas diferentes terapias que estamos cogiendo y así será. Agradecido con Dios que me dio la oportunidad de poder ver las cosas a tiempo y poder sobre todo reestablecerme", añadió.
"La Peki" no compareció este martes ni miércoles a la vista. La fiscalía informó que, ante la ausencia de su testigo principal, no estaba lista para iniciar el proceso.
El pasado 12 de enero, Ojeda Cruz, anunció que no le interesaba continuar con el proceso.
"No quiero continuar, no quiero declarar, que no tengo interés alguno", dijo a la jueza Ana Cruz Vélez.
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"Desde que yo denuncié a Juanma López, comenzó mi calvario. El proceso para mí ha sido matador, mi salud emocional se ha afectado, al nivel que saliendo de una reunión con mi fiscal, yo terminé en el Hospital Panamericano", alegó la mujer.
"El sistema me ha maltratado más que Juanma López. A mí ya se me olvidó lo que me hizo Juanma López", añadió, al denunciar alegado mal manejo del caso por parte de los fiscales.
Ante las declaraciones, la jueza declaró un receso del Tribunal. Al salir, el expúgil dijo que su expareja estuvo embarazada, pero perdió a la criatura, supuestamente, por la situación.
El pasado 15 de diciembre, Cruz Vélez le otorgó permiso al expúgil para que trabaje. Asimismo, advirtió que deberá continuar con tratamiento sicológico y en comunicación con PSAJ.
López Rivera enfrenta cargos por supuesta violencia de género.
Contra López, pesa una orden de protección durante un año. Quedó en libertad luego que el juez Jorge Díaz Reverón concediera una rebaja de fianza.
Inicialmente, se la había impuesto la cantidad de $175,000. Luego de la rebaja, tuvo que pagar $35,000. El juez ordenó que el imputado esté bajo supervisión electrónica y en su hogar, las 24 horas del día.
López Rivera fue arrestado por segunda ocasión en este caso, luego que la Oficina de Servicios con Antelación al Juicio (OSAJ) hiciera la petición de revocación al Tribunal de Caguas por violar las condiciones al enviar un mensaje a la víctima del caso de violencia de género que este enfrenta.
El Departamento de Justicia argumentó que López Rivera se dirigió a su expareja, Andrea V. Ojeda Cruz, quien lo denunció el pasado 8 de septiembre por un patrón de abusos y agresiones.
El arresto
El pasado 8 de septiembre, el Tribunal de Caguas halló causa para arresto contra el boxeador, luego de que el Departamento de Justicia presentará siete cargos de maltrato físico, sicológico, mediante amenaza y daños a la propiedad contra Ojeda Cruz, quien denunció, a través de sus redes sociales, que fue víctima de violencio de género por parte del deportista.
A López Rivera se le impuso una fianza de $175,000.00, y fue dejado en libertad bajo supervisión electrónica y restricción bajo el programa de vigilancia de la Oficina de Servicios con Antelación a Juicio.
