El número de los muertos a causa del mayor temporal de lluvia y viento en un siglo que golpeó el lunes Moscú y sus alrededores aumentó a 16 personas, informaron fuentes oficiales.
En la capital rusa el mal tiempo se cobró la vida de 11 ciudadanos y en sus alrededores fallecieron otras cinco personas, la mayoría por árboles caídos.
El temporal que se centró en Moscú durante unas horas, arrancó de cuajo miles de árboles y causó cortes de tráfico y de fluido eléctrico.
Cerca de 150 personas fueron hospitalizadas y más de cien permanecen aún en los hospitales de la capital, entre ellos, 22 niños, precisaron fuentes sanitarias.
El Centro de atención psicológica de urgencia recibió más de 400 llamadas telefónicas.
En algunos lugares de la región de Moscú se registraron más de 30 mm de precipitaciones, lo que representa más del 60% de la norma mensual.
El alcalde de Moscú, Serguéi Sobianin, expresó su pésame a los familiares de las víctimas, y escribió en su cuenta en Twitter que las autoridades toman las medidas necesarias para mitigar las consecuencias del desastre natural.
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Los vientos huracanados dejaron sin electricidad a más de 18,300 personas en la provincia de Moscú.
Los meteorólogos advirtieron de que el clima en la región central de Rusia se mantendrá inestable durante varios días y no descartan la repetición del fenómeno debido a la proximidad de un nuevo frente frío.
