Las autoridades radicaron cargos este viernes contra la exvoleibolista estadounidense Kim Willoughby por la muerte de su hija adoptiva, ocurrida en el 2016, sin embargo no se halló causa para su arresto.
En ese momento, la Policía reportó un “incidente desgraciado” tras la muerte de la niñita de tres años por una supuesta caída en la bañera.
“Alega la señora Kim Willoughby, madre de la menor de tres años, identificada como Kailia Willoughby, que mientras buscaba la toalla para secar a la niña luego de bañarla, la menor salió de la bañera y sufrió una caída, golpeándose en la parte posterior de la cabeza”, leía el informe de la Policía.
Sin embargo, tras la extensa investigación, las autoridades determinaron radicar cargos por maltrato y asesinato en primer grando contra Willoughby.
Los hechos ocurrieron el 2 de marzo de 2016, en la urbanización Sultana de Mayagüez.
Este medio supo que Willoughby reside en Orlando, Florida, pero llegó a la Isla hace unos días.
En el 2009, la atleta olímpica fue sentenciada a cinco años de probatoria por agredir a una mujer en las afueras de una discoteca de Hawaii. Además, en el 2001 había sido acusada por una agresión contra un familiar.
