La mañana de hoy marcó el segundo día del juicio contra Christopher Sánchez Ascencio, uno de los acusados por la masacre familiar escenificada el 18 de noviembre de 2014 en la urbanización Parque de Los Frailes en Guaynabo.
Durante el juicio testificó el policía municipal, Eduardo López Ríos, quien fue uno de los agentes que encontró a un joven de 13 años que fue el único sobreviviente de la matanza. El menor fue hallado en la carretera PR-174.
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De igual manera, el sargento Luis Alfonso Martínez Serrano, narró como él y su compañero lograron arrestar a Sánchez Ascencio en la urbanización Versalles en Bayamón. Un tercer testigo relató haber encontrado el cuerpo sin vida del joven, Michael Ortiz Uceda, de 15 años.
Sánchez Ascencio y José Luis Bosch Mulero fueron imputados por los asesinatos de Ortiz Uceda; Miguel Ortiz Díaz, de 66 años; Carmita Uceda Ciriaco, de 45 años; y a Clementina Ciriaco López, de 73 años.
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Ambos enfrentan cuatro cargos por asesinato en primer grado, tentativa de asesinato, agresión grave, secuestro, destrucción de prueba, robo, conspiración y violaciones a la Ley de Armas.
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