El presidente y principal de Grupo HIMA•San Pablo, Armando Rodríguez Benítez, informó el jueves la suspensión temporera de los servicios de obstetricia y las unidades de cuidado neonatal (NICU, PICU), debido a la falta de médicos.
Según Rdríguez Benítez, las nuevas disposiciones del Código Civil generan un impacto tremendo a los ginecólogos obstetras activos.
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“Lamentamos los inconvenientes que una decisión como esta pueda causarle a nuestras pacientes embarazadas. HIMA•San Pablo, como institución hospitalaria no esta exenta del impacto negativo que la crisis en el sistema de salud ha generado en servicios esenciales como las salas de parto y las unidades pediátricas", dijo Rodríguez Benítez en declaraciones escritas, quien añadió que la dramática baja en la incidencia de partos, la merma en ginecólogos obstetras activos y el impacto de las decisiones de aseguradoras, el resultado no puede ser otro.
Rodríguez Benítez aseguró que ya se le comunicó la decisión al Departamento de Salud y la Oficina del la Procuraduría del Paciente, así como a las oficinas de ginecólogos- obstetras para la revisión de planes con sus pacientes que pueden incluir acciones como la transferencia de casos a salas de partos de otros hospitales y la atención inmediata de aquellas embarazadas que lleguen con partos activos.
“Nuestro mensaje a las mujeres embarazadas, en estos momentos, no ofrecemos el servicio de Obstetricia ni Intensivo Neonatal. Es importante que planifiquen su hospital con el obstetra con tiempo. Si acuden a nuestra Sala de Emergencia, serán evaluadas y se hará una transferencia a otro hospital cuando se determine que estén estable”, añadió.
