La vendedora de jugos naturales, Lisha Ramón Mejías, quedará libre -este miércoles- bajo supervisión electrónica y con su madre como tercer custodio.
La fianza fue diferida en su totalidad, según trascendió en el tribunal.
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Contra la joven pesan cargos por agresión grave y violación a la Ley de Armas.
El pasado 22 de diciembre, el caso fue puesto en pausa luego de que, en un giro inesperado, su pareja, Joseph Fernández, decidiera que otro abogado representara a la joven, solicitando así la renuncia al licenciado Antonio Figueroa.
El abogado indicó en ese momento, que la joven había dejado un papel en el que notificaba que le daba la autoridad a Fernández sobre su representación.
Mientras, trascendió en sala que se interesaba contratar al abogado Pedro Rivera Martínez para representar a la fémina.
Los hechos ocurrieron en momentos en que en el Tribunal de San Juan se iba a llevar a cabo la vista de reducción de fianza.
Los hechos por los que la joven fue acusada ocurrieron el pasado 8 de octubre, cuando, frente a un colmado ubicado en la calle Sagrado Corazón en Santurce, alegadamente agredió a otra mujer con un arma blanca.