El Secretario de Educación, Eligio Hernández, informó este jueves que una supervisora de comedores se hizo la prueba rápida de COVID-19 y su resultado fue positivo.
El resultado surge luego de que la Autoridad Escolar de Alimentos, adscrita al Departamento de Educación (DE), determinara ampliar la lista de empleados que se someterían a las pruebas e incluir a los que participan en la operación de almuerzos de emergencia. El protocolo del Departamento de Salud solo exige que las pruebas se hagan a las cocineras.
Según se informó, la supervisora ofreció el martes una orientación de derechos civiles y asuntos administrativos a las empleadas de comedores escolares adscritas a la Escuela Urbana en Guaynabo. Aseguraron que mantuvo las normas de distanciamiento, utilizó guantes y mascarillas durante su participación.
"Inmediatamente el DE supo el resultado, envió a realizar pruebas moleculares a todos los empleados que trabajaron en la escuela (13 empleadas de comedores, 2 directores escolares, 2 enfermeras y 2 guardias de seguridad). Todos han sido removidos y estarán en cuarentena como medida de prevención. Al mismo tiempo, el municipio llevó a cabo el proceso de desinfección en las áreas del comedor y otras áreas del plantel", sostuvo Hernández en comunciado de prensa.
El secretario aseguró que los servicios de almuerzos para la población de 1 a 18 años de Guaynabo no se afectarán y que en el segundo comedor se aumentó la cantidad de porciones y se dará apoyo desde otro comedor contiguo al municipio.
"Los trabajos continuarán en la Escuela Urbana con un equipo de trabajo adicional, que fue activado en sustitución de los que fueron removidos. Hoy se están haciendo las pruebas para reportarse al comedor, una vez tengan los resultados finales", concluyó.