A prisión por “carjacking” y asesinato de guardia

Las autoridades federales detallaron que el día de los hechos, el acusado y otros cuatro sujetos planificaron asaltar a la víctima.

Un individuo fue condenado a 18 años de prisión por su participación en un robo de auto (“carjacking”) y asesinato de un guardia de seguridad ocurrido el 9 de junio de 2012 en el Complejo de Apartamentos Paseo del Rey en Carolina.

La jefa de la Fiscalía federal en la isla, Rosa Emilia Rodríguez informó en un comunicado que el imputado es Luis Antonio Crespo Santos, quien se declaró culpable el 21 de enero pasado por su participación en este caso, en el que fue ultimado Jorge R. De Jesús Ayala.

Las autoridades federales detallaron que el día de los hechos, el acusado y otros cuatro sujetos planificaron asaltar a la víctima en su puesto de trabajo en el mencionado complejo de vivienda. Los otros cuatro fueron identificados como Ashdrian, Yankee, Gamalier y Mikey, también conocido como Michael, que aún se encuentran en libertad.

Según detalló Rodríguez, Gamalier había vendido a la víctima una computadora portátil, que no se la había pagado. Los individuos planificaron ir a ver a De Jesús Ayala para cobrar el dinero, pero éste no lo tenía. Gamalier sacó una pistola, apuntó a De Jesús Ayala y le dijo “vas a venir con nosotros”. Entonces, Ashdrian, Yankee y Gamalier cubrieron la cabeza de la víctima con una camiseta, le ataron las manos a la espalda con un cable eléctrico y lo echaron hacia el asiento trasero de su Toyota Yaris rojo de 2010. Luego se dirigieron a una zona boscosa en Carolina y lo apuñalaron por la espalda y le cortaron la garganta.

Mientras tanto, la investigación arrojó que más tarde esa noche, la Policía recibió información de que los individuos estaban desmantelando un vehículo, cuya descripción era compatible con el De Jesús Ayala. Los agentes respondieron a la ubicación y observaron a un menor y al acusado desmantelando el auto. El cuerpo de De Jesús Ayala fue encontrado más tarde cerca de la urbanización Metrópolis en Carolina.

El caso fue procesado por el fiscal federal adjunto José Contreras.

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