El presidente y principal oficial ejecutivo de LUMA Energy, Wayne Stensby, dijo este domingo, que como cualquier empresa “privada”, no tiene la obligación de ofrecer detalles de la compañía ni de sus empleados, por lo que declinó confirmar si ofrecerá a la Cámara de Representantes la información solicitada sobre finanzas y empleados.
Actualmente el cuerpo legislativo mantiene un pleito incoado contra la empresa contratada por el gobierno para lograr acceso la información. Recientemente el Tribunal Supremo de Puerto Rico falló en contra de la empresa ordenándole entregar la información solicitada por entender que es de dominio público.
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A LUMA Energy se le otorgó un contrato para asumir la operación, mantenimiento y modernización de la red eléctrica de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) por medio de una Alianza Público Privada (APP).
A preguntas de la prensa en una videoconferencia para hablar sobre los trabajos de la compañía a cuatro meses de sus operaciones en la Isla, Stensby dijo que la compañía ha cumplido con el contrato firmado y que la investigación que se sigue en la Cámara ha fomentado solo la “confusión” y que sus empleados sean “hostigados públicamente”.
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“Se han recibido más de 100 solicitudes legislativas desde que LUMA comenzó a operar el sistema, pero la intención de esa investigación (de la Cámara) no es ni apoyar los clientes de LUMA ni apoyar la transformación, sino continuar causando confusión y apoyar esfuerzos que han resultado en que los empelados hayan sido hostigados públicamente. Mientras tanto, LUMA va a mantener su enfoque en el trabajo que hay que hacer de atender y poner a sus clientes primero y transformar el sistema”, señaló.
Puerto Rico
“Se trata de un litigio activo y la empresa no hace comentarios al respecto”, dijo por su parte la portavoz de prensa de la compañía.
Stensby añadió que actualmente los 3,000 empleados que conforman su fuerza laboral son suficientes para la operación, pero que la compañía sigue contratando personal nuevo a medida que va desplegando su programa de mejoras capitales. No obstante, se rehusó a especificar cuántos de esos empleados son celadores de línea.
“Ninguna empresa privada está obliga a entregarlo (la información), tampoco voy a entregar sus teléfonos, direcciones ni sus nombres ni cuánto es el salario que devengan los empleados que trabajan en la empresa”, manifestó.
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A insistencias de la prensa, dijo que la manera en que LUMA Energy le añade transparencia a sus procesos es “informándole al público consistentemente acerca de las interrupciones de servicio y cuáles son sus causas”.
Obligación contractual el ajuste de tarifas
Con relación a los ajustes tarifarios del servicio eléctrico en la Isla, argumentó que la compañía, como parte del contrato firmado con el gobierno, tiene la obligación de presentar trimestralmente al Negociado de Energía Eléctrica de Puerto Rico esos ajustes.
“Debo recalcar que Luma (Energy) no determina las tarifas del servicio eléctrico, Luma sí tiene la responsabilidad y la obligación por el contrato que firmó con el gobierno de Puerto Rico de presentar propuestas de ajustes de tarifas trimestralmente al Negociado de Energía de Puerto Rico como representante de la Autoridad de Energía Eléctrica y las tarifas no impactan de ninguna manera el ingreso de la compañía”, dijo.
En su más reciente ajuste sometido al Negociado, LUMA Energy solicitó un aumento del 16.14% en la factura de la luz para el último trimestre del año.
Interrupciones de servicio
De otra parte, Stensby dijo que para lidiar con los constantes apagones que se han estado registrando en la Isla, utiliza un sistema de triaje a lo largo de todo Puerto Rico “al igual que se hace en otras compañías similares en norteamérica”. Esto implica hacer una evaluación de los daños que lo provocaron y luego se ejecutan trabajos trabajos para restablecer el servicio por orden de prioridad, impactando primero las agencias de primera necesidad, luego las que impactan a un alto número de consumidores.
“Esto puede que sea distinto a la manera que la AEE manejaba la reparación de interrupciones, no obstante es un acercamiento estándar. Con Luma ya no se trata de a quién conoces o quién tiene influencias o es influyente… ponemos a todos los clientes primero”, señaló.
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Recalcó que aún la generación de electricidad en la Isla es responsabilidad de la Autoridad de Energía Eléctrica hasta que se complete la privatización y que recientemente han identificado problemas de confiabilidad de la flota de generación.
“Luma opera ‘carreteras’ a través de las cuales discurre la energía que genera la AEE y hemos continuado viendo recientemente, problemas importantes de confiabilidad de las flotas de generación que a la vez está impactando el servicio a todos los consumidores”, manifestó.
Actualmente la empresa ofrece servicios a a 1.5 millones de consumidores del servicio eléctrico alrededor de Puerto Rico.
Iniciarían trabajos de subestación en Cataño, Vieques y Culebra
Anunció, además, que la empresa realizará 65 proyectos financiados con $2, 800 millones de fondos federales de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés). Estos incluyen 23 trabajos de transmisión, 23 de distribución y 15 subestaciones. Actualmente ha contratado los servicios de seis firmas de arquitectura e ingeniería para desarrollar los proyectos. Unos 21 proyectos ya están proceso de aprobación de FEMA. Algunos de estos proyectos para iniciar son una subestación en Cataño y las subestaciones de Vieques y Culebra.
Dijo que estos proyectos fueron seleccionados como prioritarios por lo adelantando que se encuentran o porque se trata de trabajos fáciles de desarrollar. En el caso de la subestación de Cataño era un proyecto que ya estaba desarrollado por la AEE y se encuentra bastante avanzado en términos de ingeniería. Entiende que se trata de un proyecto importante y estratégico “y seguramente la razón por la cual la AEE ya lo había iniciado”.
Mientras, que los trabajos en Vieques y Culebra entiende que son proyectos relativamente fáciles de alcanzar desde la perspectiva ambiental y preservación histórica. Manifestó que en los próximos meses se informarán de otros planes con proyectos.
“Los proyectos que más adelantados están, se empiecen a construir a mediados del 2022 y esos primero proyectos tendrán un tiempo de construcción aproximado de 12 a 18 meses de duración”, sostuvo.
Próximos pasos para la transformación
Señaló que los próximos pasos significativos en la transformación del sistema en la Isla son el traspaso a la operación privada de la flota de generación de la AEE y sacar a la Autoridad de la bacarrota.
“La salida de PREPA de la bancarrota es crítica para retomar acceso a los mercados de capital y realmente llevar a cabo los cambios que son tan necesarios”, puntualizó.
Estimó que esta transformación eléctrica de la Isla podría tardar una década en el que se invertirán miles de millones de dólares.
“Sí se puede tardar un período de 10 años para llevar el sistema al estado deseado. Recuerden que se trata de un sistema que es el peor sistema eléctrico de norteamérica y que tomó mucho más de una dácada llevarlo al estado en el que se encuentra”, puntualizó.
Según Stensby el nuevo operador de la flota de generación está por seleccionarse e indicó que la interacción de estas empresas será la misma como la que tiene actualmente con otras empresas de generación como EcoEléctrica o AES.
“LUMA es responsable de despachar la energía y su rol será consistente con el rol que ocupa al día de hoy”, acotó.
Aclaró que no existe conflicto alguno porque la empresa está imposibilitada legalmente de licitar en ese proceso de generación.
